Cuerpo En Femenino. El poder de nuestro centro y equilibrio como meta fundamental

Por Arlinda Méndez. Cuerpo En Femenino aparece en mi vida como un espacio en el que nos encontramos muchas mujeres, con edades, procedencias, bagajes e historias personales distintos pero con un mismo foco común: somos mujeres.

La esencia femenina es compartida. Une el sentimiento, el útero, la matriz, la madre, la niña pequeña, la joven insegura y la mujer adulta con sus debilidades y fortalezas. Y me parece fascinante que exista un lugar donde podamos trabajar desde ese sitio tan nuestro y podamos desarrollar, trabajar, investigar y proyectar nuestro cuerpo y mente.

En este espacio descubro mi fragilidad, la sensibilidad de la piel y de mi ser, la parte íntima que no muestro por esos miedos e inseguridades que muchas veces nos frenan y no nos dejan avanzar. Y ahí está Lucía con su magia y su forma sutil pero directa de guiarte al infinito, al de cada una, a tu propia constelación para hacer el trabajo personal que cada una necesita, desde donde lo necesitas, y todo hecho con mucho amor. Sin entrar en nada y entrando en todo, cada cual a su ritmo y con su capacidad. Entras dura, miedosa, expectante. Y sales limpia pura y muy blandita, aunque no débil.

Buscamos el poder de nuestro centro y de nuestro equilibrio como meta fundamental y arma poderosa para aferrarnos cada día al mundo de locos donde vivimos sin perder nuestro norte y buscando siempre nuevas formas de expresarnos y sentirnos vitales.

Esta es la experiencia de Arlinda Méndez, profesora, bailarina de danza contemporánea y una de las asistentes a los talleres de Cuerpo En Femenino.